Cómo limpiar la celda de su clorador de agua salada
Si posee una piscina de agua salada, entonces sabe la importancia de una celda de clorador de agua salada. Este componente es responsable de producir cloro a partir del agua salada y de mantener tu piscina limpia y segura para nadar. Sin embargo, con el tiempo, la celda puede llenarse de depósitos de calcio y otros minerales, lo que puede restringir el flujo de agua e inhibir la producción de cloro. Si descuida la limpieza de la celda de su clorador de agua salada, puede generar mayores costos de mantenimiento y un rendimiento reducido. Aquí hay algunos consejos sobre cómo limpiar la celda de su clorador de agua salada y mantenerla funcionando de manera óptima.
1. Apague la alimentación
Antes de comenzar a limpiar la celda del clorador de agua salada, es importante apagar la energía de la celda. Esto ayudará a prevenir cualquier electrocución o daño a la celda y garantizará su seguridad. Puede desconectar la alimentación en el disyuntor o en el panel de control de su piscina.
2. Retire la celda
El siguiente paso es retirar la celda del clorador de agua salada de la piscina. Ubique la celda en el sistema de plomería de su piscina y desatorníllela de las tuberías. Tenga cuidado de no dañar ninguna de las piezas ni la propia celda durante este proceso. Una vez que se retira la celda, colóquela en un lugar seguro donde pueda realizar el proceso de limpieza.
3. Crea una solución de limpieza
Ahora está listo para crear una solución de limpieza para limpiar la celda del clorador de agua salada. Puede usar una mezcla de 1 parte de agua por 1 parte de ácido muriático o vinagre blanco. Ambas soluciones son eficaces para eliminar los depósitos minerales de la célula. Sin embargo, si elige usar ácido muriático, asegúrese de usar el equipo de protección adecuado, incluidos guantes y gafas protectoras.
4. Remoje la celda en la solución
Una vez que la solución de limpieza esté lista, coloque la celda del clorador de agua salada en un recipiente y vierta la solución sobre ella. Asegúrese de que la celda esté completamente sumergida en la solución para garantizar una limpieza a fondo. Deje que la celda se empape en la solución durante al menos 30 minutos o hasta que todos los depósitos minerales se hayan disuelto.
5. Enjuague la celda
Después de que la celda se haya empapado en la solución de limpieza, es hora de enjuagarla bien con agua. Use una manguera de jardín o una lavadora a presión para eliminar todos los restos de la solución de limpieza. Asegúrese de enjuagar bien la celda para evitar dañarla o dejar residuos.
6. Vuelva a instalar la celda
Ahora que la celda de su clorador de agua salada está limpia.